Nuestro centro fue fundado en 1970 por Don José Manuel Rodríguez Alberto, el actual titular, y a quien debemos el nombre del colegio.
La década de los 70 fue un periodo de movimientos reivindicativos por parte de educadores y agentes vinculados a la educación, ya que las islas carecían de espacios y medios para la escolarización de sus niños. Santa Cruz de Tenerife tenía, por entonces, una inaceptable tasa de analfabetismo de un 59,7, causada por la despreocupación absoluta de los poderes establecidos.
Don José Manuel Rodríguez Alberto fue uno de los educadores que, consciente de la necesidad de una educación para todos, arriesgo su propio bienestar para crear una escuela con la que paliar la carencia de plazas para la escolarización.
Se creo en su origen con un solo edificio que más tarde, pero en 1980, se ampliaría para crear un laboratorio, una biblioteca, un salón de actos, un gimnasio y diez aulas más. Posteriormente en 1985 se producirá otra ampliación con la incorporación de unos terrenos anexos al centro que serían destinados para instalaciones deportivas al aire libre. En los últimos años, se han añadido el taller de tecnología y el aula de música.
Nacido con vocación pedagógica, nuestro colegio ha tratado de destacar por su enfoque humano. Acogemos a los niños con el amor, el cariño, la cercanía y la empatía que solo puede dar una familia. Porque eso es nuestro colegio, una familia que busca siempre el beneficio de sus miembros, para conseguir que cada uno de ellos se convierta en una persona feliz.
La visión que nos guía
Humanismo ecotecnológico
Consideramos que todas las personas que recibimos en nuestro colegio, alumnos, padres, personal, proveedores, son el centro de nuestra labor, y nuestra labor consiste en procurar su bienestar y el de la raza humana. Nuestra escuela es una red de cuidado y acogida, encargada de crear lazos. Rodríguez Alberto tiene una tradición humanista y siempre se ha caracterizado por la impronta que deja en sus alumnos. Nuestro proyecto educativo está basado en esos mismos valores humanistas que han sido nuestro motor desde el origen: la dignidad humana, el respeto, la integridad, la libertad, el entendimiento, la tolerancia, la solidaridad. Y, por supuesto, en esta visión, además del ser humano está el respeto a nuestra casa común y a los valores antropológicos de nuestros pueblos.
Nuestra visión educativa se alimenta de todo lo anterior, por eso creemos en una pedagogía consciente y “lenta”, para que cada uno encuentre sus talentos y se desarrolle a su ritmo. Buscamos, a través de las metodologías activas, un aprendizaje en que cada uno es protagonista de su camino vital.
La tecnología al servicio del Bienestar de las Personas, y del Planeta es también una de nuestras apuestas principales. La competencia digital de nuestro alumnado y profesorado está asociada a la idea de los Prosumidores (consumimos información para transformarla en conocimiento que sirva para construir un mundo mejor). Por eso, además del manejo cuidamos del correcto uso de las herramientas tecnológicas.
Sostenibilidad. Agenda 2030
Como firmes defensores de la necesidad de un cambio, nos hemos propuesto utilizar los ODS como estrategia para alinear los proyectos curriculares y pedagógicos del centro, y trabajar con el concepto GLOCAL. Así pues, trabajaremos a nivel local para impactar a nivel global, para lo que estamos organizando la puesta en marcha progresiva de una serie de acciones:
- Proyectos ambientales con organizaciones variadas a nivel nacional o internacional (Teachers for Future, Red de promotores ODS, Fridays for Future…) para atajar la emergencia climática.
- Huerto o proyectos escolares con el jardín, organizaciones ambientales de la isla, protección de los ecosistemas de la isla, ecoescuela, Patrulla Verde del colegio….
- Práctica de la economía circular y consumo consciente
- Recreos residuo cero
- Vida saludable, alimentación consciente, promoción del deporte
- Coeducación, igualdad de género
- Comunidad sostenible a nivel energético
Diversidad, inclusión y educación personalizada
Como ya hemos apuntado antes, el cuidado, acompañamiento, cercanía, familiaridad, amabilidad en el trato entre los que componen la comunidad escolar son nuestra seña de identidad. Queremos seguir creciendo desde esos cimientos bien constituidos y trabajar en la mejora de procedimiento y recursos para la atención a la individualidad, y la escucha de las necesidades de cada persona. Disminuir las barreras (físicas, mentales, acabar con prejuicios) y animar al encuentro y la participación de toda la comunidad escolar es otra de las tareas de nuestro nuevo proyecto que quiere contar con la diversidad como la mayor de nuestras riquezas.
Internacionalización y competencia global
Nuestro colegio ha destacado siempre la importancia de los idiomas con proyectos como English fun, Language Campus, y viajes culturales al extranjero. Nuestro propósito es dar aún más protagonismo a la internacionalización de nuestro alumnado con programas Erasmus K1 y K2, participación en proyectos con otras escuelas, viajes de aprendizaje de idiomas, desarrollo de la competencia global (con las cuatro dimensiones que mide PISA desde 2018) …
Habilidades para el siglo XXI. Creatividad, colaboración, pensamiento crítico, comunicación, pensamiento computacional
La formación integral del alumnado es otra de nuestras bases formativas. El fomento de las artes, de la expresión cultural, del pensamiento divergente nos llevó a crear un coro que, a día de hoy, cuenta con varios palmareses. Nos interesa sobremanera el desarrollo del pensamiento matemático, para lo que algunos de nuestros docentes han puesto en marcha un proyecto de matemática manipulativa.
El pensamiento computacional a través de la Robótica y la programación ha sido otra de nuestras apuestas claras que ya están en marcha. Pero querríamos ir más allá, e incluir la programación y el diseño de animación y videojuego en nuestras aulas. Canarias está siendo un destino para empresas del sector audiovisual, animación y videojuegos, y es una oportunidad que debemos aprovechar.
Otras acciones de futuro serán la oratoria y el debate (comunicación), el desarrollo de la mayéutica socrática -la pregunta poderosa y la Filosofía para niños-, y el desarrollo de la cultura del pensamiento y la metacognición (pensamiento crítico)